La oración completa del Gloria, con su profunda alabanza a la Santísima Trinidad y su reconocimiento de la grandeza de Dios, es una joya litúrgica que trasciende el tiempo y nos conecta con siglos de devoción y adoración.
La oración Gloria completa
Gloria a Dios en el cielo,
y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos,
te bendecimos, te adoramos,
te glorificamos, te damos gracias,
Señor Dios, Rey celestial,
Dios Padre todopoderoso Señor,
Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre;
tú que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros;
tú que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestra súplica;
tú que estás sentado a la derecha del Padre,
ten piedad de nosotros;
porque sólo tú eres Santo,
sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo,
con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
Amén.
Significado de la oración Gloria
La oración del Gloria es una joya litúrgica que se ha utilizado en la liturgia cristiana durante siglos.
- «Gloria in excelsis Deo»: «Gloria a Dios en las alturas». Esta frase es una expresión de alabanza y adoración a Dios.
- «et in terra pax hominibus bonae voluntatis»: «y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad». Esta frase habla de la paz que Dios ofrece a aquellos que tienen buena voluntad y que buscan seguir su camino.
- «Laudamus te»: «Te alabamos». Esta es una expresión de alabanza y reconocimiento a Dios.
- «Benedicimus te»: «Te bendecimos». Esta es una expresión de gratitud y reconocimiento por las bendiciones que Dios nos ha dado.
- «Adoramus te»: «Te adoramos». Esta es una expresión de adoración y reverencia hacia Dios.
- «Glorificamus te»: «Te glorificamos». Esta es una expresión de reconocimiento y exaltación de la grandeza de Dios.
- «gratias agimus tibi propter magnam gloriam tuam»: «Te damos gracias por tu gran gloria». Esta es una expresión de gratitud por la grandeza y majestad de Dios.
- «Domine Deus, Rex caelestis, Deus Pater omnipotens»: «Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso». Estas frases son una invocación a Dios como nuestro Señor, Rey y Padre todopoderoso.
- «Domine Fili unigenite, Jesu Christe»: «Señor Hijo unigénito, Jesucristo». Esta es una invocación a Jesucristo como el Hijo unigénito de Dios.
- «Agnus Dei, Filius Patris, qui tollis peccata mundi, miserere nobis»: «Cordero de Dios, Hijo del Padre, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros». Esta es una invocación a Jesucristo como el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo y como nuestro Salvador.
- «Qui tollis peccata mundi, suscipe deprecationem nostram»: «Que quitas el pecado del mundo, escucha nuestras súplicas». Esta es una petición a Jesucristo para que nos escuche y nos conceda nuestras peticiones.
- «Qui sedes ad dexteram Patris, miserere nobis»: «Tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros». Esta es una invocación a Jesucristo como nuestro intercesor ante el Padre celestial.
- «Quoniam tu solus Sanctus, tu solus Dominus, tu solus Altissimus»: «Porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo». Estas frases son una declaración de la santidad, señorío y supremacía de Dios.
- «Jesu Christe, cum Sancto Spiritu in gloria Dei Patris»: «Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre». Esta es una afirmación de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) y una expresión de adoración y alabanza a Dios.
La oración del Gloria es una muestra de la riqueza y profundidad de la liturgia cristiana, y una expresión de la fe y devoción que han mantenido los creyentes a lo largo del tiempo.