Hace mucho, mucho tiempo, antes de que tú y yo existiéramos, antes de que hubiera animales, plantas, montañas o mares… no había nada. Todo estaba oscuro y vacío. Pero Dios estaba allí, y en su corazón había un gran plan lleno de amor. Dios quería crear un mundo hermoso, un hogar especial para sus hijos.
📅 El primer día
Dios habló y dijo:
—¡Que haya luz!
Y al instante la luz apareció. La luz era tan brillante y bonita que Dios la llamó “día”. A la oscuridad la llamó “noche”.
Dios sonrió al ver lo que había hecho, porque todo era muy bueno.
📅 El segundo día
Dios miró alrededor y dijo:
—¡Que haya un cielo azul encima y aguas abajo!
Y así, el cielo se extendió como un gran techo, separando las nubes del agua de la tierra.
📅 El tercer día
Dios quiso darle más forma al mundo y ordenó:
—Que se junte el agua en un lugar y aparezca la tierra seca.
Y así nacieron los mares y los continentes. Pero Dios no terminó ahí. Hizo que de la tierra brotaran plantas verdes, árboles llenos de frutas deliciosas y flores de muchos colores.
El mundo empezaba a verse alegre y lleno de vida.
📅 El cuarto día
Dios levantó su mano y puso en el cielo grandes luces:
—Que el sol brille en el día y la luna alumbre en la noche.
Y también colocó millones de estrellas que parpadeaban como pequeñas lamparitas en la oscuridad.
📅 El quinto día
El mundo ya estaba preparado para llenarse de vida.
Dios dijo:
—Que el mar se llene de peces grandes y pequeños, y que las aves vuelen en el cielo.
De repente, los océanos se llenaron de delfines, ballenas, peces de colores y todo tipo de criaturas marinas. En el aire comenzaron a volar pajaritos, águilas y palomas.
📅 El sexto día
Dios creó a los animales que viven en la tierra: el león con su melena, los caballos que galopan, las jirafas que alcanzan las ramas altas, las vacas, los perritos y gatitos.
Y entonces, como la parte más especial de su creación, dijo:
—Hagamos al hombre y a la mujer a nuestra imagen.
Así creó a Adán y Eva, los primeros seres humanos. Dios los colocó en un lugar precioso llamado Edén, lleno de árboles, flores, ríos y animales. Les dijo que cuidaran la tierra, los mares, el aire y todas las criaturas que había hecho.
📅 El séptimo día
Cuando todo estuvo terminado, Dios descansó. No porque estuviera cansado, sino para mostrarnos que también nosotros necesitamos un día de paz, de alegría y de agradecimiento.
Ese día lo bendijo y lo llamó día de descanso.

Moraleja para los niños:
Dios creó el mundo con amor y cada cosa que hizo tiene un propósito. Nos dio la naturaleza, los animales y la vida como un regalo para cuidarlos y disfrutar de ellos.
También puedes ver todo el catálogo de historias de la Biblia.